La Legislatura de Río Negro aprobó por unanimidad la creación del Programa Provincial de Financiamiento para la Vivienda (PPFV) destinado a patrimoniar a los empleados públicos rionegrinos afiliados a la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).
Con recursos provenientes del Tesoro provincial, la legislatura de Río Negro aprobó ayer la creación de un fondo de financiamiento de viviendas para empleados estatales. A través del PPFV, los afiliados a ATE podrán, adquirir terrenos, construir viviendas, refaccionar las existentes, ampliarlas y también adquirir múltiples servicios.
El Secretario General de ATE Río Negro, Rodolfo Aguiar, fue uno de los primeros en expresar su felicidad “no podemos contener la emoción los estatales rionegrinos, es la primera vez que nuestro sindicato tiene la posibilidad de acceder a una conquista de esta naturaleza“.
Aguiar había lanzado su candidatura a gobernador por Río Negro, pero sorpresivamente abandonó la carrera alegando complicaciones con su lista, y tras reunirse con el actual gobernador Weretilneck, el líder de ATE le expresó su apoyo “En mi caso personal voy a apostar por darle continuidad a un proceso de fuerte recuperación de derechos que existe desde hace algún tiempo en la provincia“. Este gesto fue generosamente recompensado y luego de las elecciones, la Legislatura provincial aprobó el pase a planta de los 3.500 contratados de ATE, y ahora convirtió en Ley el proyecto 284/19 haciendo que el Fondo para la Vivienda de empleados del gremio de Aguiar sea una realidad.
Alfredo Martín, legislador y miembro informante del oficialista Juntos Somos Río Negro (JSRN), detalló que el proyecto está orientado a “establecer un sistema que posibilite la adquisición de terrenos, construcción, refacción y ampliación de viviendas a sus afiliados, como la realización de obras de la infraestructura necesaria para dotar de servicios básicos a aquellos que no los tengan“.
De esta manera, los rionegrinos que no estén afiliados a ATE, que no tengan vivienda propia, que estén jubilados o se encuentren desempleados, financiaran a través de sus impuestos la ampliación patrimonial de los estatales locales. Es el costo del apoyo político, que nuevamente recae en bolsillos ajenos.