En marzo 2020 el gobierno nombró como Director del Mercado Central a “Nahuel” Levaggi, que en la actividad privada preside la Cooperativa UTT, a través de la cual provee al Estado 500 mil kilos de verdura por 40 millones de pesos.
Siguiendo las especificaciones del pliego, Desarrollo Social adquirió de la UTT 100 mil bolsas de 5 kg de diversos vegetales.
¿Hay sobreprecios? La selección de la UTT como proveedor fue realizada por Carlos Montaña, funcionario que fuera eyectado tras la investigación mediáticamente conocida como “el fideogate”.
Mientras el Gobierno ordenaba la contratación directa de 500 mil kilos de verduras a $400 cada bolsón, el precio minorista del mismo producto, ofrecido por el mismo proveedor, era de $200, según lo que se puede observar en las publicaciones que la UTT hace en las redes sociales.
Cabe destacar que al momento de la compra, la UTT ni siquiera estaba registrada en AFIP para realizar ventas mayoristas de verduras, situación que demuestra hasta qué punto fue arbitraria la contratación directa celebrada con la cooperativa del Director del Mercado Central.
En los papeles, Levaggi, que nunca presentó una declaración jurada desde que asumió como funcionario nacional, es secretario y representante legal de la “Cooperativa de trabajo Unión de Trabajadores de la Tierra ltda”. El resto de la cooperativa está conformada por ciudadanos extranjeros. Además, según el registro de proveedores del estado, el teléfono de contacto de la cooperativa es el celular personal de Levaggi, como se desprende de las siguientes imágenes:
A ese teléfono había de llamar Javier Antonietti, RRPP del Ministro Daniel Arroyo, para coordinar con el Director del Mercado Central montajes fotográficos del ministerio que, socolor de promover la producción alimentaria, termina repartiendo dinero entre los kioscos de los funcionarios que responden a Grabois.
¿Quién es Nahuel Levaggi?
Lo primero que hay que saber de Nahuel Levaggi, es que no se llama Nahuel sino Marcos, pero en su derrotero de Militante Popular decidió rebautizarse en una nueva identidad telúrica que lo hace “invisible” en muchos y convenientes aspectos.
Nahuel está casado con Rosalía Pellegrini Holzman, y juntos fundaron la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) que se expresa bajo muchas de las diferentes banderas que se movilizan bajo la conducción de Juan Grabois: UTT, CTEP, Movimiento Piquetero por la Dignidad, Frente Popular DaríoSantillán, MeCoPo (mercados comunitarios populares), etc.
Durante el macrismo, este frente recibió financiamiento encubierto a través del Programa de Mercados Populares, por un monto de 1.231 millones de pesos. Por entonces, Macri tomaba deudas ridículas para sostener la asistencia social y Carolina Stanley erogaba fortunas para sostener los “Mercados Populares”, sitos en un conjunto de direcciones publicadas por su Ministerio, en las que no funcionaban mercados, sino locales partidarios que se recibían el presupuesto de Desarrollo Social de Macri, pero eran bunkers de agrupaciones satelitales de la CTEP.
“¿Cómo?” se preguntará el lector. No es difícil comprender el derrotero de los movimientos que conduce Grabois, hasta 2015 combatió vehementemente a Cristina, en 2017 fue columna vertebral del armado de Randazzo, y en 2019 resultaron centrales al armado del Frente de Todos. Aunque su devenir resulte errático al ojo desprevenido, la cuestión es simple, ellos han estado siempre del lado Alberto Fernández de la vida.
Rosalia Pellegrini Holzman de Levaggi se volvió la voz parlante de la cooperativa UTT desde que Nahuel tomó control del Mercado Central de Buenos Aires.
Ella, que es empleada full time del Ministerio de Agroindustria de la Nación, organiza las más diversas intervenciones políticas y mediáticas para asegurar que el gobierno canalice ingentes cantidades de dinero hacia las cooperativas.
Estas “presentaciones” incluyen cartas públicas a Alberto Fernández y acelgas plantadas sobre montículos de tierra frente a la casa Rosada, que no distan tanto de la huerta de perejiles de Grabois con el fallido proyecto Artigas, apoyado públicamente por la UTT.
La UTT también se manifestó en contra del desalojo de Guernica, mientras el Cuervo Larroque trataba de negociar con las familias. Tras la cortina de “feminismos para habitar” Pellegrini Holzman estuvo presente en la toma, no como miembro del Ministerio de Agroindustria, sino como referente de la UTT, despotricando contra el clientelismo, mientras repartía verdura de la cooperativa que embolsó 40 millones del Estado Nacional.
