Cada dos años la democracia se pone primaveral. Los carteles florecen, coloreando las chapas oxidadas del conurbano, y a falta de pajaritos escuchamos los spots de los principales candidatos. Todo el conjunto ritual tiene como objeto celebrar la renovación estacional de la política. El pueblo, que participa usando la máscara performativa del militante, asiste a un espectáculo de promesas de cargos, subsidios y billetes frescos, que llueven como papelitos. El dispositivo carnavalesco de la campaña sirve para medir fuerzas, para discutir liderazgos, pero también para entregar algún chivo expiatorio. Una vez que terminan los comicios, su corso, la catarsis, las luces se apagan. Es la hora de barrer, y también de preguntarse ¿Cómo se paga este bacanal?
Los partidos políticos no pueden costear sus campañas electorales. Lo hace el estado. Los gobiernos están (o se sienten) obligados a malversar fondos y triangular partidas de gasto ordinario hacia la propaganda. Estamos hablando de una costumbre política contra la ley (contra legem); en otras palabras, vemos conductas que parecen típicamente delictivas, pero lejos de ser antijurídicas, constituyen nuestro orden institucional. Veamos algún ejemplo.
En 2019, la Agencia Monteagudo, formalmente Massomedia SA, hizo la creatividad del FDT por apenas $500.000. La campaña presidencial es indiscutiblemente la mayor que hay en el país, y un monto inferior a 10 mil dólares, parece irrisorio.
Luego, Massomedia SA le vende los mismos servicios profesionales a organismos estatales. Ya sin tanta timidez a la hora de poner ceros, cobraron por una de las pequeñas campañas informativas de la Agencia Telam la suma de $26.280.000.
“Monteagudo Agencia” es el bunker de Santiago Alvarez, A.K.A. “Patucho”, en el sector privado. Su CV lo ubica como Director Creativo de la empresa desde que dejó la dirección de Télam en 2015 hasta que fuera nombrado en YPF. Ahí, en el mejor de los mundos, donde la política pone directores pero la caja es privada, Patucho administra el presupuesto de comunicación y marketing.
En los papeles, el titular de Massomedia S.A. es Tomás Aguerre (@TomiOlava), y fue Jefe de Gabinete de Asesores en Télam antes de saltar al sector privado con su jefe Patucho.
Aunque la empresa no publica en su portfolio ningún trabajo realizado para la agencia oficial de noticias u otros clientes estatales, hay link a la actual campaña del FDT, y eso merece nota aparte 👇
Si todo está corrupto y no queda otra que una especie de ‘ortivismo’ a ultranza, ¿no cabe preguntarse si la lucha no es otra que el mero moralismo?
No sé quién le paga la campaña a FdT y mucho menos quién a Juntos e, Pcia Bs As. que recorro todos los días y que la veo empapelada con afiches y pasacalles de Cambiemos, Jutos, o como se llame.
También noto que abra lo que abra de la web en mi PC me encuentro con Santilli y Mannes con una superioridad de 20 a 1 con respecto al FdT.
Podrían Uds. decirme quién banca la campaña de Santilli en la Pcia y de Mariu en CABA?
Si. Sale entre hoy y mañana. Abrazo!
NOSTROS!!!!!!!!!!… TU, EL, NOSOTROS, VOSOTROS, ELLOS… TODOS PAGAMOS LA CORRUPCION Y JODA DE TODOS Y CADA UNO DE LOS GOBIERNOS
En serio nos querés hacer creer semejante proporción a favor de Juntos??? Me pudro de cerrar emergentes con las caras de m—-a de Gollan y la Tarambana Paz, la mafia k ha puesto guita a morir para estas paso. Cambiemos recibe mucha guita de empresas, prefiero eso a la que se gastan los del Frente Mafioso
La coima y el sobreprecio son ya una verdadera institución política en la argentina. De ahí sale la plata para las campañas cuando no sale se la droga, la prostitucion o el juego.
Los parásitos de l política nos cargan la adición de todos sus gastos,son una casta de degenerados inmorales,insensibles traidores que jamás se cansan de traicionar a la nación y esquilmar los ciudadanos para vivir como nobles a expensas nuestra!!