MacAir Jet nació en 1993 cuando Mauricio le puso alas a sus sueños y se nombró “Presidente y Director Titular Único” de la aerolínea recién constituida, según consta en vetustos boletines oficiales. Pero MacAir nunca fue noticia hasta hace algunas semanas cuando, ya “transformada” en Avian Líneas Aéreas SA, recibió del gobierno de su fundador y ex presidente el 100% de los destinos aéreos solicitados a la ANAC, quedando en condiciones de reemplazar los segmentos de mercado que dejará vacantes una Aerolíneas Argentinas que sucumbe antes las políticas de austeridad y achicamiento impulsadas por el propio Macri. En efecto, mientras el presidente se rasga las vestiduras hablando de déficit, su viejo y querido emprendimiento aeronáutico experimenta un crecimiento explosivo.
El otorgamiento de las rutas fue escandaloso porque todos los funcionarios intervinientes tenían profundos vínculos empresariales con Macri y con MacAir, por lo que en diciembre de 2016 los diputados Cabandié y Tailhade presentaron una denuncia penal, ampliada luego con investigaciones realizadas desde El Disenso. En el marco de la causa, en febrero de 2017 el Fiscal Di Lello imputó a varios gerento-funcionarios por la posible comisión de los delitos de asociación ilícita, fraude contra el Estado y tráfico de influencias.
Aunque la situación tomó bochornoso estado público en las últimas semanas, el tema venía teniendo cierta cobertura marginal y fragmentaria en los medios. La referencia más antigua al interés de Efromovich por MacAir se remonta al 26 de febrero de 2016, cuando el periodista Alejandro Bianchi, de TN, deslizó que el magnate volador se había reunido con Guillermo Dietrich, Ministro de Transporte, para expresar su deseo de comprar una aerolínea argentina con la que realizar vuelos de cabotaje e internacionales. En la bajada de la nota el medio de Magneto deslizaba que el principio de acuerdo ya estaba cerrado.
Cuando hace un año Efromovich, que a través de su holding controla el 51% de Avianca, expresó su interés en MacAir Jet, todos los funcionarios que hoy están imputados ya habían sido designados en sus respectivos puestos. Al mismo tiempo, el cambio de titularidad y denominación de la empresa eliminaba, desde el punto de vista del oficialismo, cualquier hipótesis de conflicto de intereses: MacAir ya no era de Mauricio Macri. Pero existe la posibilidad de que el plan para deshacerse de Aerolíneas Argentinas y reemplazarla con la aerolínea de Mauricio fuera anterior al nombramiento de los hombres clave en los lugares estratégicos para garantizar el éxito de cada detalle del proyecto comercial. No en vano el propio Mauricio, haciéndose eco de aquel viejo adagio que dice “nada de lo que deba ser estatal quedará en manos del estado”, fue siempre un enemigo declarado de la existencia de una aerolínea estatal.
En 2014, impulsado por los buenos resultados electorales, por el fin de ciclo de Cristina y por el suyo propio al frente de CABA, Mauricio Macri empezaba a trabajar en su plan de gobierno. Entre los principales temas de su agenda política, como lo dijo docenas o cientos de veces, estaba la problemática de Aerolíneas. Si existiera una asociación ilícita encabezada por Mauricio para poner MacAir en las rutas de Aerolíneas Argentinas es posible que ésta haya comenzado mucho antes de la designación de sus hombres de confianza en los lugares estratégicos para ejecutar el meganegocio, por lo que desde El Disenso investigamos minunciosamente en búsqueda de publicaciones anteriores a la asunción de Macri que permitan entrever la preexistencia de este plan. No es poco lo que encontramos.
El plan aerocomercial de Mauricio y la transformación nominal de MacAir Jet en Avianca Argentina se remonta a 2014, concretamente al 7 de mayo de aquel año. Aquel miércoles Lucas Ponce Ocampo, empleado municipal del GCBA que Mauricio se llevó para MacAir y que hoy es un hombre clave de Avián, se desempañaba como Jefe de Abastecimiento y Compras de MacAir Jet. Según él mismo expresa en su CV de LinkedIn, se encargaba específicamente de la negociación de contratos y se ocupó de registrar a su propio nombre el dominio web que hoy, 3 años después, es la plataforma oficial de la empresa: www.avianca.com.ar. El registro de un dominio web es un típico acto preparatorio para la instalación de una marca y es una de las primeras medias que se toma durante la etapa precontractual.
Si bien Ponce Ocampo no ocupaba un rol de informático en MacAir ni había registrado el dominio de esa empresa, registró el com.ar de Avianca desde su rol de encargado de negociación de contratos, muy probablemente estando en conocimiento de información confidencial, cosa habitual en gente de su posición. En Mayo de 2016 Ponce Ocampo volvió a Nic.Ar, esta vez para registrar, también a su nombre, el dominio aviancaargentina.com.ar, demostrando en la repetición de su accionar que el primer registro no fue una mera casualidad.
En ese contexto, es más que razonable pensar que el empleado registró ambos dominios por orden de su empleador y que Mauricio Macri ya había planificado el negocio de las low cost junto a Efromovich mucho antes de designar a los hombres clave en los lugares estratégicos para concretar la retirada de Aerolíneas y facilitar el fabuloso negocio de las low cost.