Luego de que el juez Casanello desestimara la denuncia contra el Jefe de Gabinete por el uso de la base de datos de ANSES para difusión de actos de Gobierno, el fiscal Delgado inmediatamente apeló la decisión por “prematura” y ahora será la Cámara Federal Porteña quien dictamine si se debe investigar al Jefe de Gabinete, el funcionario que ejerce la administración general del país.
Casanello ayer desestimó la denuncia contra Peña Braun por la que la que fuera imputado y evito así ordenar las medidas de prueba solicitadas por Delgado en el marco de la investigación de la causa.
El fiscal consideró prematura la decisión del juez de desestimar por “inexistencia de delito” la denuncia contra Marcos Peña Braun. Delgado explica que al cerrar el proceso de manera definitiva “se impide el ejercicio de la acción penal pública” y también hizo mención al “modo brusco” en que se tomó esa decisión sin siquiera estudiar “si la decisión administrativa que alcanza a la Jefatura de Gabinete de Ministros, de la Administración de la Seguridad Social y de la Secretaría de Medios contravino el régimen de protección de datos personales”.
La decisión es prematura “porque el Señor juez instructor impidió realizar un escrutinio sobre un acto administrativo en base a especulaciones y adjetivos que dimanan de la voluntad del Señor juez, pero que carecen de elementos de prueba incorporados a la causa, que es la única base material que permite cerrar un proceso del modo en que se hizo”, advirtió el fiscal.
Delgado, quien recientemente imputó a Macri en la causa de los Panamá Papers y procesó a José López por los millones de dolares hallados en el convento, presentó un muy preciso dictamen que advierte que “la fiscalía había sugerido requerir una opinión a los expertos del Estado, más dos opiniones independientes”, una tarea relativamente rápida y sencilla y que “Al resolver de la manera en que lo hizo, el Señor juez se salteó la etapa previa de una sentencia, que es la de la investigación”.