Hoy desde El Disenso te contamos como Macri se convirtió en el Papá Noel de los hombres de Fé que visitaron esta mañana Casa Rosada, regalándole al Obispado de Posadas la narcoescuela de Candelaria en Misiones, construida con dinero proveniente del narcotráfico, con la finalidad de blanquear esas divisas. La institución educativa quedará en manos de Monseñor Martínez, quien ofreció su mansión para que su amigo, el cura Néstor Monzón, imputado en Santa Fe por abuso de menores, pudiera cumplir su prisión domiciliaria.
Los obispos que visitaron esta mañana Casa Rosada se fueron con un regalito: el inmueble donde funciona el Instituto “Crisol Universal”, con una matrícula de aproximadamente 600 alumnos entre nivel primario y secundario. La escuela fue otorgada de forma gratuita al Obispado de Posadas, a cargo de Monseñor Juan Rubén Martínez.
El Instituto llegó a manos del Estado luego de ser decomisado en mayo de 2013 por la justicia correntina, en el marco de una causa en la que los implicados fueron condenados por “encubrimiento por lavado de activos de origen ilegal“.
Popularmente conocida como la “Narcoescuela”, el establecimiento fue construido en tiempo récord con dinero del narcotráfico, y con la finalidad de blanqueo de divisas provenientes de esa actividad. Según la pagina web de la Institución, la misma sigue a cargo de Aubria Galeano, quien fuera detenida en 2007. De acuerdo a la causa, la pareja de Galeano era Pedro Norberto “Comandante” Sánchez, ex miembro de Gendarmería Nacional, dueño de un prostíbulo en Paso de los Libres y quien habría estado a cargo de la organización vinculada al narcotráfico, trata de personas y contrabando de cigarrillos, que operaba en la frontera con Brasil y Paraguay. En noviembre a través de un decreto, el presidente autorizó a la AABE a subastar otros 3 inmuebles explotados por los mismos acusados, la Estancia “El Haragán”, el Motel Alojamiento ‘Momentos’ y la Whiskeria Roxy. A pesar de la investigación, la institución educativa, avalada por el SPEPM – Servicio Provincial de Enseñanza Privada de Misiones, continuó funcionando con normalidad.
El Caso Monzón
Monzón, cura santafesino de 48 años, fue detenido por la justicia en abril de 2016 acusado de “abuso sexual gravemente ultrajante, agravado por su condición de sacerdote”. Los abusos ocurrieron el jueves 26 y viernes 27 de noviembre de 2015. Durante la investigación, los peritos confirmaron que una de las víctimas había sido contagiada con HPV durante el hecho por lo que el cura también está acusado de haber contagiado una enfermedad de transmisión sexual a una niña que en ese momento tenía apenas 3 años. Si bien Monzón fue excarcelado, un par de semanas después apareció una nueva víctima, esta vez un niño de 4 años, por lo que la justicia volvió a detenerlo, y actualmente le fue concedido el beneficio de prisión domiciliaria hasta tanto comience el juicio oral y público.
El actual obispo de Posadas, Monseñor Juan Rubén Martínez, está al frente de la diócesis desde marzo de 2001. Perteneciente al clero diocesano, nació y se ordenó sacerdote en San Isidro. Martínez, que también fue obispo en Reconquista, se presentó en la causa de Monzón como su amigo, y ofreció la mansión en la que vive en Posadas, frente a la Costanera, para que el cura acusado pueda cumplir la prisión domiciliaria junto a él en Misiones. Al ser oportunamente consultado al respecto, el hombre de Fe negó la versión aduciendo que “eso es un invento“, y solo al ser confrontado con una copia del escrito presentado por el abogado del cura Monzón, Monseñor cambió la versión y admitió que “capaz que lo pusieron como una alternativa“, aunque es la única dirección que figura en la solicitud de audiencia.
Un Fiscal contra un Monseñor
Monseñor Martínez fue acusado por el Fiscal Rubén Martínez de coacción agravada en el marco de la causa que investiga al cura Néstor Fabián Monzón, por abuso sexual agravado de dos menores de edad. El Fiscal denunció que el obispo buscó amedrentarlo durante una reunión sostenida en los tribunales de Reconquista donde el hombre de Fe asegura que solo se acercó a preguntar por la suerte de su amigo acusado.
“Voy a proceder a denunciar al Obispo Juan Rubén Martínez porque las escuchas telefónicas me cierran el círculo de que realmente había una idea de venir a entorpecer la marcha del proceso. No es casualidad que este hombre haya venido a tratar de amedrentarme o tratar de presionar a la Fiscalía como lo hizo en ese momento“.
Luego de ser denunciado por el Fiscal Martínez, Monseñor se presentó en Santa Fe ante la comisión de Acuerdos de la Legislatura para cuestionar el pliego del fiscal para su promoción a fiscal regional de Reconquista alegando haber sido “víctima de una mentira de él que dijo que yo lo había coaccionado”. El 1 de agosto de este año, el Fiscal Rubén Martínez juró como Fiscal Regional de la Cuarta Circunscripción Judicial en el salón de actos de la Corte Suprema de Justicia en Santa Fe. Mientras el obispo asegura no haber sido notificado de una acción iniciada en su contra, Eladio García, Fiscal General de Santa Fe, confirmó la demanda penal iniciada por el Fiscal Martínez por “coacción”.
Monseñor Juan Rubén Martínez dedica su carta para este tercer Domingo de Adviento a San Juan Bautista el “Profeta de la Verdad”. Quien no duda en viajar cientos de kilómetros para impedir el ascenso de un fiscal, niega haber sido demandado mientras un fiscal general confirma la demanda penal en su contra, y miente públicamente antes de admitir que le ofreció la mansión del obispado a su amigo acusado de abuso sexual para que cumpla la prisión domiciliaria junto a él, en Posadas, será quien en breve esté a cargo del Instituto Crisol, donde acuden diariamente 600 niños.