Durante una entrevista en Córdoba el presidente anunció con bombos y platillos que los jubilados recibirán en septiembre un aumento mayor al 10%. La última vez que la movilidad jubilatoria estuvo abajo del 10% fue en marzo de 2010, cuando la inflación del primer semestre fue del 5,9%.
Desde los primeros días de agosto se espera el anuncio oficial con la movilidad jubilatoria que indica el aumento que recibirán los jubilados a partir del primer día del mes de septiembre. Acaso por las próximas elecciones o por la creciente inflación, el gobierno viene dilatando la publicación de la Resolución pertinente en el Boletín Oficial y las especulaciones respecto al monto son muchas y muy variadas.
Hoy fue el presidente el encargado de anunciar que la movilidad estará arriba del 10%. No arriba del 11% o del 12%, como estuvo en el pasado mes de marzo donde fue del 12,96%.
De esta manera, el “maravilloso anuncio presidencial” solo significa que los jubilados recibirán la movilidad jubilatoria más baja de los últimos 8 años en una coyuntura donde se espera la inflación más alta de los últimos 10 años.
Una movilidad jubilatoria “arriba de un 10%” es una nueva tomada de pelo a uno de los sectores mas débiles de nuestra sociedad, que increíblemente es señalado en las encuestas como el sector de votantes más fieles de Cambiemos en todo el país. El magro porcentaje se da en un contexto donde los jubilados tienen mayores gastos por la eliminación de gratuidad de remedios, y de las prestaciones habituales de PAMI como los médicos de cabecera, sesiones de kinesiología y rehabilitación, acompañamiento terapéutico, prótesis, etc y la suba de servicios que afecta a toda la comunidad, pero en particular algunos que son indispensables para gran parte de la tercera edad como taxis y remises o tarifa de luz y gas.
En marzo de este año Macri debió anular la resolución emitida por el ANSeS de Basavilbaso que había cambiado la fórmula de cálculo del incremento jubilatorio reduciendo el porcentaje. Según Macri solo se trató de un “tecnicismo matemático” pero el escándalo desatado obligó al presidente a dar marcha atrás con el ajuste encubierto y brindar una conferencia de prensa urgente excusándose públicamente por el cambio en el cálculo. En ese momento Macri resaltó que el índice de aumento de marzo fue de cuatro puntos por encima de la inflación del segundo semestre de 2016. Según sus números, la inflación semestral 2016 fue de 8,8% y la movilidad jubilatoria a 12,96% significó que los ingresos de los jubilados tomaron valor, pero la realidad demostró estar bastante lejos de las apreciaciones matemáticas presidenciales.
Nuevamente, la técnica de Cambiemos de presentar como beneficio la quita de un derecho adquirido parece funcionar de maravillas entre sus cándidos votantes.