Mientras el presidente continua asegurando que las inversiones ya “están en camino“, hoy desde El Disenso te mostramos porqué no van a llegar nunca.
El pasado 15 de enero, la firma global de servicios legales Baker McKenzie le realizó una encuesta a 125 inversionistas de Norteamérica, Europa y Asia. El resultado arrojó un “creciente optimismo” respecto a las oportunidades de inversión en el área de M&A (fusiones y adquisiciones) en América Latina.
De acuerdo a la publicación, los inversores internacionales esperan un crecimiento en la actividad de M&A en la región durante el 2018, con el impulso dado por el rápido crecimiento de la clase media, la urbanización de la región y la evolución tecnológica de sus industrias, que hacen más atractivos sus activos.
El estudio “A Buyer’s Guide to M&A in Latin America” asegura que cuatro de cada cinco inversionistas espera que la actividad de M&A crezca en la región durante el 2018. Un 40% de ellos dijo sentirse “muy confiado” en invertir en América Latina, aunque sólo el 1% elegiría Argentina como destino para su inversión.
Casi tres cuartos de los inversionistas dijeron que planean inversiones este año en Chile, principalmente debido a la percepción de ser un país con un estricto marco jurídico y regulatorio. Por otra parte, el 66% y el 61% planean invertir en Brasil y en México, respectivamente. Chile y México fueron considerados los países que ofrecen un mejor clima para los negocios entre los 6 países analizados en América Latina (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Perú).
Adicionalmente, el estudio concluyó que la Alianza del Pacífico está captando rápidamente la atención de los inversores extranjeros al haber eliminado el 92% de los aranceles de importación entre sus países e integrado sus mercados de valores en una sola plataforma.
Los resultados de este estudio también muestran un cambio significativo en los factores que promueven la inversión en la región. Mientras que en el pasado algunos inversores dirigían su atención a Latinoamérica porque no podían encontrar buenos activos en sus territorios, los encuestados manifestaron que el deseo de incrementar su participación de mercado (37%) y de adquirir empresas líderes en sus respectivas industrias (36%) son ahora las principales razones detrás de sus planes de actividad transaccional tanto para compañías como firmas de capitales privados.
La encuesta también indagó sobre los desafíos que enfrentan los inversores en la región. El estudio encontró que los obstáculos regulatorios (33%) y la obtención de información suficiente sobre el activo (25%) son los mayores obstáculos durante la etapa de due diligence.
Casi tres cuartos de los encuestados aseguraron que planean realizar inversiones este año en Chile, principalmente debido a la percepción de ser un país confiable, con un estricto marco jurídico y regulatorio.
La volatilidad del mercado (35%) y el cierre de las brechas de valoración de los activos (33%) fueron mencionados como los mayores obstáculos en la negociación de los contratos.
De esta forma, queda claro que si bien los inversores extranjeros muestran confianza en las oportunidades de fusiones y adquisiciones en América Latina, con el retorno de Piñera al poder, Chile se posiciona como el destino número uno para futuras inversiones en la región, seguido por Brasil, México y Colombia, pero la inestable Argentina de Macri no logra atraer a los inversores extranjeros, quienes la relegaron al último lugar de la lista.