Ante la caída libre del PRO en las encuestas, el equipo de campaña le solicitó a la gobernadora que delegue de urgencia todas sus funciones ejecutivas en la provincia para dedicarse de lleno a timbrear y hacer fotos con los candidatos a Senadores.
Según el decreto 2017-272-E-GDEBA-GPBA publicado en el Boletín Oficial 28.057 del martes 27 de junio de 2017 Vidal detalló la delegación de sus facultades como Gobernadora según lo especificado en el Expediente N° 2166-1357/17. De esta manera, Vidal continuará portando el título de “Gobernadora” pero sus funciones serán realizadas por diferentes miembros de su equipo.
Luego de la fallida “Operación Randazzo” para polarizar los votos del PJ, la candidata estrella de Duran Barba es la única que aún registra un mínimo de imagen positiva en la gestión, por lo que deberá ponerse la campaña al hombro y patear la calle para tratar de levantar las encuestas.
Esta semana Vidal desempolvará sus botas de goma y su camperita inflada negra, y caminará el conurbano junto a Gladys Gonzalez y Esteban Bullrich para tratar de llegar al corazón de quienes la votaron en 2015. El problema que enfrenta quien juntó votos a fuerza de prometer que “No vas a perder nada de lo que ya tenías” es que a casi 2 años de gestión deberá vérselas cara a cara con votantes que perdieron subsidios a los servicios, trabajo, remedios, pensiones, planes para poder seguir estudiando, comida en comedores y decenas de derechos adquiridos durante el gobierno de CFK, quien vuelve para defender los derechos sociales conquistados para el pueblo durante su gobierno.
Otra de las preocupaciones del comite de campaña es resguardar lo que queda de imagen positiva de la Gobernadora puesto que en las últimas presentaciones públicas sufrió escraches y reclamos por parte de sus propios votantes, lo que fuerza a los organizadores de estas puestas en escena a tener especial cuidado con la seleccion de locaciones y asegurar la información para que no se filtre hasta luego de realizada la sesión de fotos.
La imagen de Vidal dejará las micro minifaldas y retomará el estilo maestra de jardín de infantes que le supo pagar con un alto caudal de votos en el conurbano, para eso la gobernadora volverá a ser “Maria Eugenia”, colgará el vestidito rojo por unos meses en su placard y le dará lugar a un vestuario cuidado para la ocasión, donde sus modistos y asesores justificarán sus abultados sueldos en la gobernación fomentando el uso de ponchos telúricos y colores oscuros.