La policía de Grindetti y Vidal mató a golpes a un albañil que detuvieron por averiguación de antecedentes. La familia y los vecinos de Maximiliano Orellana solicitan apoyo para que el hecho no quede impune.
Según informa Lanús Al Día, medio local que viene realizando un exhaustivo seguimiento del caso, el día viernes 16 alrededor de las 17h, Maximiliano Orellana un albañil de 36 años fue a buscar a su hija al colegio, la dejó en su hogar y salio a buscar una puerta para la obra en la cual trabajaba. En el camino lo interceptaron dos policías por averiguación de antecedentes.
Según el testimonio de los vecinos presentes, Orellana explicó a los policías que iba a buscar una puerta. En ese momento los uniformados lo tiraron al piso, lo esposaron y lo trasladaron a la comisaria 5ª (cuya cúpula Grindetti cambió en abril de este año). Orellana fue trasladado esposado al UPA cerca de las 20h donde a los pocos minutos falleció. Testigos de la golpiza en la calle y de su ingreso al UPA se comunicaron con la familia para dar fe de los hechos.
El día Jueves el intendente Grindetti, Diego Kravetz y el ministro Ritondo fueron abordados por los familiares de Maxi, quienes le reprocharon no haber condenado el hecho y ni siquiera haberlos llamado para darles las condolencias pero no obtuvieron respuesta de parte de las autoridades.
Ayer familiares de Maxi Orellana, sus amigos y vecinos realizaron la segunda marcha a la comisaría 5ª para solicitar que los efectivos involucrados en la golpiza sean separados de su cargo y se investigue el hecho.
La familia hizo públicas las fotos del cuerpo de Maxi, donde se puede apreciar que recibió golpes varios e inclusive impacto de bala y reclaman que tanto Grindetti como la gobernadora Vidal los reciban y se expidan respecto a este caso de brutalidad policial que no logra llegar a los medios como para que el gobierno tome cartas en el asunto.
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